Si tu día a día se caracteriza por horas ininterrumpidas delante del ordenador, intensas reuniones, actividad cerebral desbocada, ejercicios mesiánicos de paciencia, carreras contrarreloj y una predisposición a convivir con la contraprogramación horaria, será porque posiblemente tú también trabajas en marketing, comunicación u organización de eventos. Todas ellas profesiones incluídas en el top 20 de los trabajos más estresantes de España.
Son mundos apasionantes que conllevan cierto nivel de estrés ¡qué le vamos a hacer! en mayor o menor cantidad, el estrés laboral es uno de los principales problemas de la sociedad occidental.
La mala noticia es que este inevitable estrés laboral puede afectar a tu salud emocional y física, y eso conlleva riesgos a corto, medio y largo plazo.
Como todos estamos en el mismo barco, para nada te vamos a aconsejar que bajes el ritmo o que cambies de trabajo, pero sí se nos ocurren algunos consejos para proteger tu organismo (por dentro y por fuera) y ayudarte a armonizar la vorágine cotidiana con tu “chi”.
Son mundos apasionantes que conllevan cierto nivel de estrés ¡qué le vamos a hacer! en mayor o menor cantidad, el estrés laboral es uno de los principales problemas de la sociedad occidental.
La mala noticia es que este inevitable estrés laboral puede afectar a tu salud emocional y física, y eso conlleva riesgos a corto, medio y largo plazo.
Como todos estamos en el mismo barco, para nada te vamos a aconsejar que bajes el ritmo o que cambies de trabajo, pero sí se nos ocurren algunos consejos para proteger tu organismo (por dentro y por fuera) y ayudarte a armonizar la vorágine cotidiana con tu “chi”.
Ojo con tus ojos
¿Se te quedan los ojos achinados de tanta pantalla? Es normal cuando pasas tantas horas entre ordenadores, teléfonos o televisión. Y cuidado porque la fatiga visual provoca irritación, hinchazón de los ojos, visión borrosa y hasta dolores de cabeza y falta de concentración.
El primer consejo de los expertos es un descanso de como mínimo 10 minutos sin pantallas cada dos horas (y no vale mandar ni un WhatsApp). Mantente a una distancia mínima de entre 40-60 cm de la pantalla y práctica de tanto en cuanto algún ejercicio visual como parpadear, alternar la visión entre objetos cercanos y lejanos o rotar las pupilas.
El primer consejo de los expertos es un descanso de como mínimo 10 minutos sin pantallas cada dos horas (y no vale mandar ni un WhatsApp). Mantente a una distancia mínima de entre 40-60 cm de la pantalla y práctica de tanto en cuanto algún ejercicio visual como parpadear, alternar la visión entre objetos cercanos y lejanos o rotar las pupilas.
Postura sana in corpore sano
Cada trabajo tiene sus formas y sus normas de higiene postural, pongamos que en el nuestro pasamos largos, largos, larguísimos ratos en una silla. ¿Los pasamos? Entonces mejor que sea en una silla ergonómica y sin desatender descansos para caminar unos pasitos, mover las articulaciones y estirar las zonas del cuerpo que más se nos sobrecargan, sea cuello, hombros, etc.
Después de todo nuestra espalda es el pilar de nuestra salud corporal, y nadie negará que las ideas fluyen mejor cuando estamos bien alineados.
Después de todo nuestra espalda es el pilar de nuestra salud corporal, y nadie negará que las ideas fluyen mejor cuando estamos bien alineados.
Tu cuerpo pide azúcar y lo sabes
Que si un bollito, una chuche, un bombón. No sabemos si eso de que la ansiedad se alimenta de azúcar es una leyenda urbana, pero lo cierto es que a más actividad cerebral, más apetecen los dulces.
Tampoco es cuestión de eliminar la glucosa de tu vida, pero con una alimentación equilibrada de 5 comidas al día (¡Ojo! Que estas sean adecuadas y sanas) y teniendo siempre a mano snacks saludables, podrás pasar horas pensando y pensando sin caer en bajones glucémicos emocionales.
Tampoco es cuestión de eliminar la glucosa de tu vida, pero con una alimentación equilibrada de 5 comidas al día (¡Ojo! Que estas sean adecuadas y sanas) y teniendo siempre a mano snacks saludables, podrás pasar horas pensando y pensando sin caer en bajones glucémicos emocionales.
Bebe water my friend
¿Te concentras tanto, tanto, tanto en lo que estás haciendo que se te olvida beber agua? Mal. La deshidratación influye negativamente en tu rendimiento y puede conllevar riesgos de accidente laborales y más aún si se trabaja con calor.
Ya sabes que la sed es el último indicador de que estás dejando a tu cuerpo seco, pero ¿sabías que la falta de agua puede darte dolores de cabeza, calambres o cansancio? Así que con sed o sin ella, bebe agua que no encharca.
Ya sabes que la sed es el último indicador de que estás dejando a tu cuerpo seco, pero ¿sabías que la falta de agua puede darte dolores de cabeza, calambres o cansancio? Así que con sed o sin ella, bebe agua que no encharca.
Respirar para inspirarse
No siempre estamos al 100% y autoexigirnos no nos ayuda. Si sientes que no te concentras o no acabas de resolver un problema, tómate un respiro, escápate a dar una vuelta, oxigénate, siéntate en el parque, medita. Haz caso al latiguillo de los creatas “Out of the box”, a veces 10 minutos de libertad son mucho más productivos que horas dándonos de cabeza contra una mesa.
Lo que te mueva
No vamos a caer en el topicazo de recomendarte tal o cual deporte, solo decirte que el movimiento ayuda a generar endorfinas y que las endorfinas son necesarias para compensar el nivel de estrés que vives entre semana (y a veces también los fines de semana).
Si es bailar, si es maratonear, practicar lucha libre, hot yoga, pelota vasca, volley playa, hulahoop, pasear por las montañas, tirolina o fútbol, reserva unas horas semanales y disfruta.
Si es bailar, si es maratonear, practicar lucha libre, hot yoga, pelota vasca, volley playa, hulahoop, pasear por las montañas, tirolina o fútbol, reserva unas horas semanales y disfruta.
Ni el último ni el primero, pero reírse siempre es mejor.
Y si es en equipo, doblemente mejor. Cuando convives más de 8 horas diarias, compartiendo proyectos, objetivos y “marrones”, acabas creando una curiosa comunidad, que, por lógica, no es ajena a tensiones ni momentos incómodos, así que una buenísima idea es tratar de equilibrar la balanza creando momentos de complicidad y diversión.
Que no todo en el trabajo sea sufrir.
Algunas propuestas como practicar una actividad periódica (lúdica o deportiva), buscar momentos para charlar de forma distendida con el equipo, o hacer juntos un taller de risoterapia, os ayudarán a empatizar unos con otros y sacar el mejor partido de cada reto que afrontéis.
En definitiva, no te prometemos que siguiendo estos consejos vayas a ser mejor profesional que nadie. A modo de conclusión/moraleja, todos sabemos o hemos experimentado lo difícil que es sacar un proyecto adelante desde el malestar o el cansancio físico o emocional, y por el contrario, cuando te sientes bien, tu equipo y tu entorno también lo están, y el buen rollo y la salud se reflejan, de una manera u otra, en los resultados.
Algunas propuestas como practicar una actividad periódica (lúdica o deportiva), buscar momentos para charlar de forma distendida con el equipo, o hacer juntos un taller de risoterapia, os ayudarán a empatizar unos con otros y sacar el mejor partido de cada reto que afrontéis.
En definitiva, no te prometemos que siguiendo estos consejos vayas a ser mejor profesional que nadie. A modo de conclusión/moraleja, todos sabemos o hemos experimentado lo difícil que es sacar un proyecto adelante desde el malestar o el cansancio físico o emocional, y por el contrario, cuando te sientes bien, tu equipo y tu entorno también lo están, y el buen rollo y la salud se reflejan, de una manera u otra, en los resultados.